(Publicado en Extoikos, octubre de 2014)
En este artículo se analiza cómo se ha formado históricamente, desde el siglo XVI, el sistema dentro del cual interactúan los Estados y sus entes instrumentales (organizaciones internacionales). Se exponen algunas críticas a este sistema, por la pretendida conservación de prebendas, singularmente económicas, por las potencias occidentales que lo conformaron. Por último, se analiza el impacto de la crisis financiera principiada en 2008 (la Gran Recesión), que podría haber alterado los cimientos de las estructuras más recientes, posteriores a la Segunda Guerra Mundial, que, insertas en el supermarco general antes señalado, han regido la política y la economía mundial desde entonces.